9/18/2009

A un mes de todo...

Pensar que hace un mes te sentía en mí, fuimos lo más importante que tuvimos. Sintiendo de forma indescriptible, sintiendo, sintiendo...

Fue un lunes por la mañana, vi tu bello rostro sonreír al notar mi presencia. Después de tanta espera. Después de soñar con tanto ahínco. Imaginando cómo seríamos. Descubriéndonos.

Tu ausencia acabó con mi sonrisa. Absorbió aquello que por ti sentí. Nos alejó como nunca creímos sucedería. Tuve también culpa. No estuve como me jacté haría. No cuidé ni velé por ti lo suficiente. Te mentí. Nos mentimos. ¿Acaso fue verdadero aquello que sentímos?

Aunque fugaz, el encuentro fue dichoso. Me alegró infinitamente verte, hablarte, abrazarte. El día había llegado, era nuestro momento. Etendido por dos. Añorado por dos. Vivido por nosotros dos. Aunque fugaz...

Después de un mes... ya no es lo mismo. Aún vivimos, reímos, recordamos, pero no por las mismas razones. Dejamos de ser dos, dejamos de soñar. Vivimos el ahora y todo lo que este nos trae. El pasado es eso, algo que no será más que olvidado. Todo aquello que creímos haríamos, compartiríamos quedó a un lado. Solíamos sonreír al pensar el uno en el otro, ahora nuestro rostro se ensombrece al hacerlo.

Hemos cambiado. Cada uno ha tomado su rumbo, su camino. Lo hecho, hecho está y sólo queda afrontar la realidad. Ya empezaste a hacerlo, ahora me toca intentarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario